Aproximadamente 150 mujeres trabajadoras campesinas y de la ciudad de diferentes organizaciones se reúnen este sábado 12 y este domingo 13 de diciembre en el Hotel Los Alpes de San Bernardino para discutir sobre “Propuestas ciudadanas para una política de cuidados”. Se trata del noveno “Encuentro entre mujeres activistas y líderes de la sociedad civil”.

En cada edición del Encuentro las líderes y activistas reflexionan sobre distintas realidades que afectan a nuestra sociedad y a las mujeres. Las políticas de cuidado son temas emergentes que desde el Centro de Documentación y Estudios se viene trabajando sistemáticamente.

Patricia Jaramillo, docente de la Universidad Nacional de Colombia y educadora popular es una de las invitadas al encuentro. Jaramillo habló de la Economía del Cuidado y se refirió a un estudio realizado por una arquitecta colombiana en las casas de los cafeteros. “En el estudio se muestra que la cocina y el lavadero quedaban en el fondo, donde no se vieran, donde se hacen la limpieza, el único espacio asignado a las mujeres en la casa tradicional cafetera es la cocina, y si subían un poco de status, el otro lugar era el salón de los bordados”, expresó.

Perla Álvarez, de la Coordinadora de Mujeres Rurales e Indígenas explicó que en las cabezas de las mujeres paraguayas, desde la cultura se refuerza la idea la “Kuña Guapa” como alguien que debe hacer mil cosas al mismo tiempo porque de lo contrario es alguien que no sirve ‘para nada’ y que tiene roles expresamente asignados en torno al cuidado.

Las feministas buscan plantear una discusión en torno a la igualdad y a las políticas de cuidado como herramientas para alcanzar las condiciones reales para la igualdad y este encuentro busca generar propuestas compartidas desde los movimientos de mujeres para las políticas de cuidado en el Paraguay.

“Para avanzar en los derechos de las mujeres es imprescindible que haya mujeres organizadas. Participar dentro de los diversos espacios organizados en la sociedad civil. Para que avancemos en los derechos, tenemos que saber qué derechos queremos, qué necesitamos. Para ampliar los derechos, se necesita luchar por ello”, dijo Clyde Soto del Centro de Documentación y Estudios.

“El trabajo del cuidado no se valora y no se contabiliza, pero existen estudios que muestran cómo los trabajos que cuidados, que permiten a las otras personas reponer la fuerza de trabajo, representa el 20% de las ganancias de las personas que trabajan fuera del hogar. ¿Qué pasa si tenemos que ir a trabajar y no hay alguien que cuida a los chicos?”. El cuidado para las mujeres constituye además un ‘deber moral’ asignado por la sociedad. Porque si no se cuida al niño –decía Patricia Jaramillo-, o si el chico está desnutrido ¿de quién es la responsabilidad? Cuando hay reuniones de padres en las escuelas ¿quiénes van? O cuando el chico se enferma, ¿quién le lleva al médico?” Las participantes coincidieron todas: ¡La mamá!

“No somos las únicas responsables, todas y todos debemos compartir la responsabilidad, y el Estado también”, finalizó Jaramillo.